El alcalde de Lubrín, Domingo Ramos, llevará su batalla por la seguridad de la carretera A-1101 al próximo Parlamento de Andalucía. El regidor socialista pedirá a los parlamentarios de su partido que incluyan una partida específica en los Presupuestos de 2026 para eliminar los puntos negros de esta vía, que se cobró la vida de un camionero de Albox el pasado 20 de junio.
Ramos insistió en que su petición no consiste en «construir una autopista», sino en realizar una actuación quirúrgica y urgente: «ampliar el radio de las curvas más cerradas donde es imposible que dos vehículos pesados se crucen con seguridad». El primer edil lamentó profundamente que la Junta de Andalucía no haya contemplado ya esta intervención en su proyecto de cuentas para el próximo año, que Ramos viene reclamando desde 2015, sin éxito.
Mientras Ramos busca el respaldo político en la Cámara autonómica, su homólogo en Zurgena, Domingo Trabalón, ha optado por una estrategia técnica. El alcalde popular ha encargado un informe sobre alternativas para mejorar la carretera a los ingenieros de la empresa Cosentino, principal usuario de la vía debido a la explotación de la cantera de Rambla Aljibe.
Trabalón sostiene que, «antes de reclamar financiación a la administración autonómica, es imprescindible determinar con exactitud la cuantía económica necesaria para las obras». Esta aproximación técnica complementa la vía política emprendida por Ramos, mostrando dos estrategias diferentes para abordar un problema que afecta por igual a ambos municipios.
La presión de los dos ayuntamientos mantiene viva la reclamación vecinal que exige el fin de la peligrosidad en una carretera que es la principal vía de entrada y salida para Lubrín, sus polígonos industriales y la vital cantera. Ambos regidores coinciden en su objetivo: que no haya que lamentar más víctimas mortales en la A-1101. (VEA NUESTRA PORTADA DE HOY)
-TAMBIÉN LE PUEDE INTERESAR:
Los 132 vecinos de Palacés no quieren recibir las aguas residuales de toda Zurgena si no se regeneran para el riego
