Un total de 37 crías de tortuga boba han emergido en las últimas horas en el nido de la playa de la Rumina de Mojácar, mientras que en Tabernas, en las incubadoras de Oasys MiniHollywood han nacido 13 crías. La costa del Levante ha sido testigo de un evento extraordinario, un acontecimiento de gran valor para la conservación de la fauna marina.
El pasado 22 de junio, una tortuga boba (Caretta caretta) depositó un nido con 99 huevos, un suceso que activó de inmediato el protocolo de atención y movilizó a los servicios de Medioambiente de la Junta de Andalucía. Ante el riesgo de que el nido se viera afectado por las mareas, se decidió reubicarlo parcialmente para garantizar la supervivencia de las futuras crías en otro punto más seguro de la costa mojaquera, aunque una veintena de huevos se trasladaron a Tabernas donde han sido incubados en condiciones específicas y controladas, con humedad y temperatura constantes que ha permitido su correcto desarrollo.
En total, en dos días han eclosionado 51 crías, y se espera que haya más nacimientos durante la noche. Este fenómeno se enmarca en la custodia de la Junta de Andalucía, que supervisa el nido original, y en la colaboración de Serbal, la Sociedad para el Estudio y Recuperación de la Biodiversidad Almeriense que organizó turnos de vigilancia con más de 30 voluntarios para proteger a las crías frente a depredadores.
Las 13 tortugas nacidas en Tabernas ya han sido enviadas a Algeciras, donde permanecerán un año, mientras que las de Mojácar serán trasladadas al Centro de Gestión del Medio Marino Andaluz en Algeciras en los próximos días. El objetivo es que, dentro de un programa de headstarting, las crías crezcan y se alimenten durante un año para aumentar sus posibilidades de supervivencia antes de la liberación definitiva.
Aun quedan dudas sobre cuántas crías más nacerán en el nido y si existen huevos viables pendientes de eclosión. La tortuga boba figura entre las especies vulnerables de la UICN y su conservación se ve amenazada por la pesca no selectiva y la contaminación.
En Almería, casos de anidamiento de tortuga boba se han registrado en Vera (2001), Pulpí (2015) y Mojácar (2021 y 2023), entre otros, y este aumento parece residir tanto en cambios climáticos que abren nuevas áreas de anidamiento como en una mayor vigilancia y conciencia ciudadana que favorece la detección y protección de estos eventos. (VEA NUESTRA PORTADA DE HOY)




