El municipio de Pulpí amanece a la espera de cuantificar el impacto económico de la intensa granizada que ayer domingo sorprendió a la zona de San Juan de Los Terreros, tiñendo de blanco el paisaje en un fenómeno poco habitual en esta zona costera. Mientras las infraestructuras públicas y viviendas parecen haberse librado de daños, la principal incertidumbre está ahora sobre el sector agrícola local, a la espera de evaluar los posibles estragos en cultivos al aire libre e invernaderos.
El episodio, de notable intensidad y corta duración, transformó en minutos las calles y campos en un inusual manto blanco, provocando una avalancha de imágenes y vídeos en redes sociales compartidos por vecinos sorprendidos. «Fue algo impresionante, en muy poco tiempo todo estaba cubierto», relataban testigos a través de estas plataformas.
El primer edil, Juan Pedro García, confirmó este lunes que, según los primeros datos, no se han registrado daños en infraestructuras públicas ni en propiedades vecinales. «Afortunadamente, de momento no tenemos constancia de incidentes en edificios o redes», explicó el regidor.
Sin embargo, su preocupación se centra en el capítulo agrario. El Ayuntamiento está a la espera de recibir información directa y evaluaciones precisas por parte de las empresas y explotaciones agrícolas de la zona para conocer la magnitud real de los daños. «Estamos pendientes de saber cómo ha afectado esta granizada a nuestras empresas agrícolas, especialmente a aquellas explotaciones al aire libre y a los invernaderos», señaló García, subrayando que la prioridad ahora es «cuantificar los daños y ver de qué manera podemos apoyar al sector».
La zona de Pulpí no es un área predominantemente agraria como el Poniente almeriense, pero sí cuenta con un número significativo de invernaderos y cultivos extensivos que son vitales para la economía local. El granizo, por su carácter destructivo y contundente, es una de las meteorológicas más temidas por los agricultores, ya que puede arruinar cosechas enteras en cuestión de minutos.
Las imágenes difundidas, que muestran una capa considerable de granizo acumulado, han generado preocupación entre los profesionales del sector, que en las próximas horas procederán a inspeccionar sus fincas para evaluar los posibles daños en frutos, estructuras de invernaderos y plantas.(VEA NUESTRA PORTADA DE HOY)
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